europa ya cayo ante ideologias extrañas como la de genero, aqui en perusalem estamos resistiendo, ojala que no nos toque un juicio muy fuerte e parte de YHWH
Es la verdad el ateo de verdad verdad nunca pregona ser ateo lo es y simple .. el otro ateo es posero que a lo mínimo cambia .
A quien le dices Gil, ignorante. Está comprobado que Jesús existió. Acaso no lees la Biblia. Está bien que seas ateo, pero no impongas tus ideas. Y eso de la religión te vuelve esclavo es mentira, te hace libre.
epeep-epe-pe-pe-pe-pe-pe-pe-ep-eppero siempre puedo contar con tu dios, para perdonarme y salvarme, ¿no es así?
El ateísmo no existe. Porque incluso los ateos que no creen en ningún ente creen en un dios y que en muchos casos ellos mismos se dicen ser dios.
Cree en lo que quieras, Juancho. De lejos se nota tu ignorancia y tú f Jajajaja. Lo único que queda es reírse de este tema. No perderé mi tiempo. Y no soy ateo, eso es para los que gustan perder el tiempo.
Lo curioso de Dios es que nunca tiene pierde: -Si hay pandemia y mueren miles de personas entonces "está poniéndonos a la prueba" o "está castigándonos por nuestros pecados". -Si en el caso un par de personas se curan milagrosamente entonces "es obra de Dios" o "Dios es bondadoso y piadoso" Entonces se concluye que es como un concepto abstracto al cual nos aferramos pase lo que pase para sentirnos mejor. Un efecto placebo.
Pegarse a Dios en momentos como estos es peligrosísimo. Durante la pandemia de la peste bubónica en Europa, muchos se pegaron a Dios, creyeron hallarse frente a un castigo divino, y empezaron a flagelarse como acto de contricción, 33 veces (la edad de Cristo), 3 veces al día. El resultado fue que en sus dermis laceradas las pulgas de la rata sintieron la sangre y fueron atraídas como moscas frente a la miel, donde no tenían que esforzarse para sacar sangre, y en donde depositaban sin ninguna barrera inmunológica a la Yersinia pestis; y murieron cerca de 10 veces más la cantidad de gente que hubiera tenido que morir sin esa forma de contaigo. Eso me parece suficiente razón para, más bien, apartarse de Dios en situaciones como estas. Aún si tuviera evidencia objetiva de que apegarme a Dios va a reducir en algo mis posibilidades de morir, tampoco lo haría; lo haría talvez si tuviera miedo a morir, pero yo estoy satisfecho con mi vida, no he ahorrado en experiencias, conocimientos y lecturas, he trazado mis metas las cuales he cumplido, he vivido a plenitud, y estoy listo para morir en cualquier momento, sin temor, sin miedo, para irme de la mano de las Parcas como viejos amigos. Sus aborrecibles tijeras no me intimidan, ni me parecen tales, asumo con dignidad nuestro destino universal. Mientras tanto, prefiero pegarme a la ciencia, a la evidencia objetiva, al experimento reproducible, al método científico, a lo único que nos ha demostrado fehacientemente que sirve de algo, y que aún cuando no tenga todas las respuestas que en un momento dado de la historia necesitemos tener a mano, es la mejor manera que tenemos de hallarlas. Si deseas, ora, pégate a tu dios, sigue tus dogmas; yo no, gracias, me voy con Asimov.
En la Biblia ya están las ordenanzas para prevenir enfermedades infecto-contagiosas como el coronavirus muchos siglos antes que sean descubiertas por la ciencia. Lavado de manos, disposición de excretas, cuarentena, consumo de animales salvajes como murciélagos, etc. como prevención de enfermedades recién fueron descubiertas por la ciencia hace poco tiempo. De hecho durante las grandes epidemias los judíos no se enfermaban ya que cumplían estrictamente esas ordenanzas.